El Triángulo de las Bermudas, En aguas malditas T2: La primera víctima · Piratas en el Caribe

¡Vale, suéltala! En este capítulo de El Triángulo de las Bermudas, en Aguas Malditas...

¡Aquí! ...las misteriosas desapariciones que lo iniciaron todo.

Este es uno de los primeros incidentes que llamaron la atención sobre estas aguas malditas.

Fueron estos dos barcos de la Guerra de Secesión las primeras víctimas del Triángulo.

¿Qué es eso? Son dos de los especies más antiguos en El Triángulo de las Bermudas.

¿Fue un accidente fortuito? ¿Hay alguna posibilidad de que a esos barcos les diera un rayo? ¿O algo más oscuro? Se metía pólvora, se cerraba y se metía en el horno.

¡Bingo! ¡Mirad esto! Esta podría ser la prueba irrefutable.

Existe un lugar que evoca fascinación y pavor.

Delimitado por Florida, Las Bermudas y Puerto Rico.

El Triángulo de las Bermudas ha engullido innumerables barcos, aviones y personas.

Ahora, un grupo de expertos se está sumergiendo en él.

¡Al agua! ¡Al agua! Y está haciendo grandes hallazgos.

Has dado con el Challenger.

Su arma secreta, un mapa, elaborado durante décadas de restos sin identificar.

Las inversiones son peligrosas.

¿Qué diablos ha sido eso? Alguien cuerdo no haría esto.

Su misión, resolver el misterio del Triángulo de las Bermudas, suceso a suceso.

Tío, ¿lo estás viendo? La madre naturaleza se llevará estos restos.

El tiempo corre.

El Triángulo de las Bermudas, en aguas malditas.

La primera víctima.

Buenos días, chicos.

Buenos días.

Amanece en Jacksonville, Florida, y los buscadores de Precios Mike Barnett y Jimmy Gadomski están cargando los equipos.

Su objetivo de hoy está a 128 kilómetros de la costa.

Se llama el Precio de la Hélice.

Fueron los pescadores submarinos locales quienes nos hablaron de este lugar.

Llevan décadas pescando allí.

La razón por la que se llama Precio de la Hélice es que ese es uno de los elementos más prominentes que se ven en el fondo.

Tiene un largo eje de transmisión.

Está bastante lejos de la costa, a unos 128 kilómetros más adentro.

Nos llevará un buen rato llegar hasta allí.

Al estar tan lejos de la costa, debemos tomar ciertas precauciones.

Porque si tenemos un problema o algo por el estilo, nos llevará el mismo tiempo volver que llegar hasta aquí.

Pero es un riesgo que vale la pena correr.

El equipo tiene dos sospechosos principales para este Precio.

Se trata de dos de los primeros barcos que se perdieron en la zona del Triángulo de las Bermudas.

Octubre de 1865.

Apenas unos meses después del final de la Guerra de Secesión, el DH Mount zarpa de Nueva York con destino a Jacksonville, Florida.

El DH Mount era un barco de vapor de una sola cubierta y propulsado por hélice que fue construido en 1863 con madera de roble blanco.

A bordo viajan 23 submarinos.

A bordo viajan 23 ciudadanos partidarios de la Unión, incluido un juez que va a formar parte del gobierno de la Florida de la posguerra, Samuel Burritt.

El reinado de terror confederado llevó a estos pasajeros al norte durante la guerra.

Ahora regresan a casa a la espera de una bienvenida incierta.

Aunque el ejército confederado se había rendido unos meses antes en Florida, el resentimiento y la resistencia seguían siendo una preocupación.

La Guerra de Secesión acababa de terminar y estos 23 partidarios de la Unión regresaban para ayudar a dirigir el futuro del estado de Florida.

El barco es avistado por última vez a 320 kilómetros al sur del Cabo Hatteras, sin peligro aparente.

Pero a medida que se aproxima los confines del Triángulo de las Bermudas, el barco desaparece.

A bordo había 23 pasajeros que regresaban a casa, lo llevaban todo a bordo, desde su ropa hasta sus pertenencias, incluso sus vajillas.

Había varios rumores sobre cómo pudo desaparecer el DH Mount.

¿Fue un incendio? ¿Fue el impacto inesperado de una ola? Pero no podemos asegurar por qué desaparecieron estos pasajeros.

Tras un largo y accidentado viaje, el barco se aproxima por fin al pezio.

Sospechamos de un barco, así que vamos a tratar de hacer la inmersión para reunir información que apoye nuestra teoría del barco que pensamos que es.

La misión de hoy se complica por el extraño hecho de que el pezio podría ser uno de dos barcos casi idénticos.