Un pobre hombre, un relato de Francis Bret Harte

A cuento creado y dirigido por josé luis garcía rueda literatura ojos cerrados programa números doscientos cincuenta y seis hoy queremos un pobre hombre un relato de francis break art y se llamaba farc vino con nosotros a california el año mil ochocientos cincuenta y dos en el disfrute opino que el espíritu aventurero no influye mucho en su partida probablemente no tendría otro lugar donde ir por las tardes cuando reunidos los jóvenes ponderar vamos las magníficas colocaciones que habíamos abandonado y cuán tristes habían quedado nuestros amigos al vernos partir cuando enseñamos a tipos y bucles de cabello y hablábamos de maría y de susana el pobre hombre el día sentarse entre nosotros y no se escuchaba penosa mente humillado aunque sin decir esta boca es mía quizá no tenía nada que decir carecía de camaradas excepto cuando nosotros lo protejamos y en honor a la verdad nos divertía bastante no hacía viento para encarar una gorra y ya se mareaba nunca pudo acostumbrarse a la vida de a bordo jamás olvidaré cuanto nos reímos cuando abelardo le trajo un pedazo de tocino en un cordel y pero ya conoce todo el mundo está canta clásica luego bromea a sus costas con gran regocijo la señorita en gracia no podía sufrirlo le hacíamos creer que se habían capricho no le enviamos al camarote libros y golosinas era de verla chistosa escena que tuvo lugar cuando tartamudeando luchando contra el mareo subió a darle las gracias por los obsequios menudo enfado tuvo ella parecía sea dora según dijo abelardo que sabía de memoria y no estaba hemos enfocado el viejo farc sin embargo no nos guardo rencor y cuando abelardo cayó enfermo en valparaíso el viejo fac lo cuido esmerada mente era en resumen un chico de buena pasta pero le faltaban valor y empresa carecía en absoluto de todo sentimiento estético pues alguna vez llegó habérsele sentado remendar su ropa vieja mientras que abelardo recitaba los conmovedores apóstol de girona al océano en cierta ocasión preguntó muy serio abelardo si creía que va girón si hubiese mareado en alguna ocasión no recuerdo la respuesta de abelardo pero sí que todos nos reímos y creo que no dejaría de ser buena pues abelardo no carecía de humanismo el día que les cae display pero llegó a san francisco celebramos un gran banquete combinas en reunirnos todos los años y perpetuar tal acontecimiento por supuesto que no combinamos safari que era un pasajero de tercera como se comprenderá era necesario ya que estábamos en tierra ser un poco prudentes pero el viejo faja como le llamábamos aunque no tendría más allá de veinticinco años se ha dicho entre paréntesis fue para nosotros aquel día objeto de gran guasa según par se concibió la idea de ir a pie a sacramento y realmente partió en dicha forma la fiesta fue chaval nos dimos todos un buen apretón de manos y cada uno fuese por su lado ay de mí no hace de ello ocho años y sin embargo algunas de aquellas manos estrechas entonces amistosa mente se han alzado de unos contra otros y han entrado furtiva mente nuestros bolsillos comimos ya juntos al año siguiente porque el joven vi que el juro que no sentaría jamás en la misma mesa que ocupación canalla tan despreciable como remigio y a colas el que pidió dinero prestado en valparaíso al joven supo que servía de en un restaurant no le gustaba encontrarse con gente de tal realidad habiendo comprado una cantidad de acciones del cayó te están en mano subir cincuenta y cuatro se me ocurrió subir hasta allí y examinar lo me despedí la fonda del imperio y después de comer busque un caballo di la vuelta al pueblo y me dirigí a las minas se me indico uno de aquellos individuos a quienes los corresponsales de los periódicos llaman nuestro inteligentes noticiero y que en las comunidades pequeñas se toman fácilmente el derecho el dar toda clase de informes la fuerza del ámbito le permitía ya trabajar y a un tiempo sin olvidar jamás una cosa por otra hizo una especie de historia del criadero y añadió mire usted y se dirigía al banco que tenía antes