Una exposición de botellas convertidas en arte y mucha solidaridad

Hemos dicho que hoy vamos a hablar de eficiencia energética y hemos hablado de la electricidad, con lo cual puedes cargar tu coche tranquilamente aquí o el móvil en Garbera durante una hora de forma gratuita y te vas a casa con tu móvil cargado a tope. Te puedes jugar, también hemos hablado de tecnología.

Vamos a hablar de solidaridad y luego hablaremos de gastronomía, pero vamos a hablar con la solidaridad con algo muy curioso. Ayer se presentaba a eso de las seis y media de la tarde una exposición muy especial en la que se funden varios aspectos. Por un lado, podemos llamarlo gastronomía, porque son botellas, la mayoría son de vino y por otro, arte. Han reunido a gente, chefs, diseñadoras de moda, gente así muy dedicado a lo que es joyeros, por ejemplo esta monoa y les han dado una botella sin una etiqueta en su día y con esa botella ellos pues decidían qué hacían pero tenían que hacer prácticamente una joya.

El resultado lo tienes aquí en Garbera, hemos echado un vistazo y hay cosas muy curiosas. Lo más importante de todo esto, lo más importante es que eso se va a subastar en noviembre en Madrid. Ahora está haciendo un giro, digamos una gira por centros comerciales y demás espacios, ahora está en Garbera, pero en Madrid aterrizará en noviembre y habrá una subasta y todo ese dinero irá a Saporeac.

¿Para qué? Lógicamente para dar de comer a 2.500 personas todos los días o 3.000 personas todos los días. Con nosotros se encuentra Peyo Garciamiano, que es el almamater de Saporeac. ¿Qué tal, cómo estás? Muy buenas, pues bien.

¿Quién es Peyo Garciamiano? Pues fue en su día un gran gastrónomo, que sigue siéndolo, lógicamente, ahora estás jubilado, pero es un guindilla, entonces no puedes cogerte los viajes del inserso y estar venidor, lógicamente, a comer pinchos ahí en la zona vasca de venidor. Sobre todo porque no nos dan, yo no sé a quién se los dan, porque alguna de ellas he intentado y no he cogido nunca.

Pero sí que es cierto que, bueno, tú, Peyo fue una figura, yo creo que importante en el sentido de que, en aquel entonces, yo creo que eso ahora es imposible, en aquel entonces, Peyo conseguía que las grandes figuras de estrellas, la alta gastronomía, que había sus estrellas Michelin, aterrizaran y hacerlo popular, ¿te acuerdas? Ahora que está aquí Inchao Rondo, que estamos en Inchao Rondo, como quien dice, aquellas jornadas, aquellas semanas de gastronomía que hacías, que eran muy populares y que lo que venían eran grandes estrellas Michelin a cocinar a sociedades, jornadas gastronómicas de Inchao Rondo, se llamaba, ¿no? Sí, semana gastronómica.

Semana gastronómica, eso, semana gastronómica de Inchao Rondo.

Sí, la verdad...

Eso hoy imposible, vamos.

Bueno, hoy se podría hacer, ¿eh? Lo que pasa que, bueno, pues habría que buscarle la fórmula. Yo ahora siempre digo que hoy, ahora lo haría más, mucho más tranquilo porque ahora creo que tendría subvenciones, entonces no teníamos ni una subvención, por eso luego hubo que montar la feria de la cerveza para poder sacar el dinero para pagar la otra, que era deficitaria. Tú bien has dicho, hubo un día que fue que celebramos el centenario de Arzak, un domingo, y vinieron todas las estrellas Michelin de España, todas, no faltó nadie, eso no lo ha conseguido nadie, ni el Grumén, ni...

No lo ha conseguido Arzak.

Nadie.

Ni tú.

Nadie. Entonces, pues bueno, y otra de las cosas importantes que siempre lo he tenido ahí, y me has dado un poco pie, ¿no? En esta casa, aquí, en Garbera, concretamente, en esas jornadas se hacía el cine y la gastronomía, que hoy se la está poniendo en las medallas otro tipo de gente, que sabemos...

Que no tiene nada que ver con lo que hacéis vosotros, ¿eh? No, pero bueno, que se sepa que nosotros empezamos el cine y la gastronomía, aquí, en Garbera, venían todos los días, había una película en Garbera, y luego era la cena que decíamos en la sociedad.

Oye, yo me pregunto, pero, ¿tú realmente estás jubilado o trabajas más que antes? Más, porque ahora lleno otro rollo.

Bueno, pero de otra forma, no sé, a gusto, haciendo lo que al final me gusta, ¿no? Yo siempre a Juan Manuel Arzak le he oído lo mismo, siempre decía lo mismo, tu trabajo tiene que ser tu hobby.

Entonces, pues yo he tenido la gran suerte de que mi hobby sea la gastronomía y pueda disfrutar trabajando con la gastronomía, ¿no? Y entonces, pues bueno, a la que luego, pues sí, como siempre, pues te gusta ir, meterte en un lío y sales de ese lío, que ya estoy, y te metes en otro, ¿no? Dices, bueno, hasta aquí llego, ya no voy a hacer más, y sigues, y sigues.

Pero está muy claro, la gente que hemos sido una gente movida desde siempre, no podemos parar, es imposible.

Bueno, lo que pasa que ahora no haces ese tipo de historias, ahora te dedicas más a la solidaridad.

Fuisteis a Lesbos, visteis el panorama que había allí y os comprometisteis que había que dar de comer, al menos una comida buena, a esa gente en los campos de refugiados.

Lleváis ya 10 años haciéndolo.

Ahora vamos a hacer 10 años y sí, eso fue así, pues desde la noche a la mañana, cuando veíamos todo el mundo en la tele,