La vida en 35mm: “La evasión” (Jacques Becker, 1960).

Buenas noches amigos y amigas, estamos ya en una nueva temporada del programa Diálogos con la Cultura, de Eka Edu, y hoy abrimos temporada con la sección La vida en 35 milímetros, y siempre lo hacemos con los responsables de esta sección, no hay nada mejor que empezar con el cine una temporada, y los responsables de esta sección son nuestros amigos Rubén, Rubén Benítez, muy buenas noches, muy buenas noches Manolo, Leandro Pinto, muy buenas noches, qué tal buenas noches, y también Ricardo, Ricardo muy buenas noches, buenas noches, y bueno ellos, digamos empiezan esta nueva temporada por decirlo así, dando un salto cualitativo a esta sección de 35 milímetros, La vida en 35 milímetros, y lo que nos proponen, y vamos a ponerlo en marcha ya hoy mismo, dedicar esta temporada 25-26 con los esenciales del cine francés, el cine francés nos da mucho juego, y bueno también acudir a él, porque también es acudir a los clásicos del cine, sin más, no sólo el clásico del cine europeo, y hoy, por decirlo así, empieza esta serie del cine francés, con uno de las grandes películas de la historia del cine, sin más, que es La evasión 1962.

Sí, la verdad que yo la considero una de las de las simas del cine mundial, no solamente del cine francés, por lo que representa la forma de rodarla, el mensaje, la intra historia, el sentido de la puesta en escena que tiene, y es una película que ha encandilado a generaciones de cinéfilos, y es una de esas películas, lo hablábamos antes, que uno no se cansa de ver, que las puedes ver una y otra vez, y siempre descubres algo nuevo, o siempre te sientes fascinado por aquello que te fascinó también en los visionados anteriores.

Una película que te atrapa, que te contagia, que te genera una gran empatía con los personajes, y que también es muy interesante como objeto de análisis, de análisis fílmico, que es un poco lo que nos reúne aquí. Y es una película además que tiene una historia muy curiosa, porque la última película de Jas Becker, él murió un mes antes de que se estrenara la película, desgraciadamente, y es la primera de José Giovanni como guionista, que después también fue director y colaboró como guionista con otros directores franceses, entonces la primera de José Giovanni como guionista, novelista también, novelista, guionista, director, y la última de Jas Becker.

Y esa unión entre los dos, pues, creó una obra maestra, sin paliativos, no solamente dentro del cine francés, como tú decías antes, Manon, un clásico del cine europeo, sino una película emblemática dentro de lo que es ese subgénero que es el cine de la fuga, ¿no? Que Truffaut dijo directamente que le parecía la mejor película que se había hecho sobre ese género, pero a años luz del resto. Y eso es lo que vemos en esta película, una película muy interesante en ese sentido.

Claro, y como todas las obras de arte sustantivo, poético, sencillamente obras maestras, en este caso del cine, pues la película no sólo tiene un valor per se, sino que se proyecta, digamos, a la gran influencia que ha aportado a ese subgénero que decía Rubén, el género carcelario, el género de evasión, en grandes películas que después han venido y que beben directamente de la evasión, ¿no? Y tenemos, por ejemplo, un año después la gran evasión, 1963, de John Sturckx. Fuga de Alcatraz, de Don Siegel, 1979. Evasión o victoria, 1981, de John Huston. Y Leandro apuntaba otra más, ¿no? La cadena perpetua, modernamente, ¿no? 94. Que ha dejado innegablemente un rastro ya en estas películas, no sólo de una forma, sino digamos de