

Description of Ya te la sabes 15032025 p337
Te invitamos a escucharnos todos los sabados en punto de las 15:00 hrs. En compañía de Fundación NAHI presentando su programa Ya te la sabes, con el tema de hoy: como vivir el presente sin añorar el pasado, para tener una vida plena
Compártenos tus comentarios y síguenos en nuestras redes sociales.
Proyecto Radio MX, con sentido Social.
This content is generated from the locution of the audio so it may contain errors.
Muy caluroso, para no perder la costumbre, o no sé si sea la bendita Andropausia de su servidor, ya no sé si es una cosa o es otra, pero bueno, finalmente estamos aquí saludándoles, les agradecemos que nos permitan una hora de su valioso tiempo.
Bueno, este es un programa, ya te la sabes, un asalto a tu amor, tu amor y a tu conciencia en la sección Hablando Entre Líneas, este es gracias a Proyecto Radio MX y gracias obviamente a Fundación Nahi, que sin ellos no podríamos hacer este programa, les invitamos también que nos sigan en todas nuestras redes sociales, Amazon Music, Spotify, Face, Youtube, etc, etc, etc.
Bueno, el tema de hoy, un tema muy interesante, vivir el presente sin añorar el pasado para tener una vida plena, pero antes de empezar quiero darle la bienvenida a mis compañeros, a Paco Méndez, que ya lo conocen.
¿Qué tal? Muchas gracias, muy buenas tardes.
A mi compañera Herminia de Negrete.
De Negrete, es un gusto compañeros.
Y nuestra invitada muy, muy, pero muy especial, Mónica Ivón Gutiérrez.
Muchas gracias, muchas gracias por haberme invitado.
Bienvenida, psicóloga y tanotóloga.
Sí, muchas gracias.
Muy bien, pues vivir en el presente sin añorar, sin añorar demasiado el pasado para poder quitarnos ciertas telarañitas que por ahí podemos tener en nuestra cabecita, verdad.
Bueno, usted, amigo mío, digo amigo mío porque no puedo decir amigo o amigo porque es en plural, es que se dice amigo mío.
Estará de acuerdo conmigo en que rememorar asuntos o cosas del pasado puede ser incluso un dulce refugio para el alma.
El pasado en todos nosotros engloba muchas experiencias que nos han llevado a nuestro aquí y a nuestro ahora a través de un proceso claramente definido de lo que ya somos ahorita.
El pasado es como un baúl, es como un baúl de recuerdos tanto felices como tristes, de decisiones malas y afortunadas.
El pasado es ese baúl lleno de sorpresas y de acontecimientos, incluso de personas que estuvieron a nuestro lado y que por diferentes circunstancias ya no están.
Rupturas porque se fueron a otros países o porque trascendieron incluso, verdad, entonces a veces añoramos de una manera sana ese pasado, es refrescante muchas veces.
Sin embargo, hay un pero, el vivir anclados en el pasado es una forma de perder de vista el presente.
Bueno, vamos a entrar así en materia y le preguntamos a nuestros compañeros e invitada, ¿por qué nos quedamos muchas veces atrapados en ese pasado? ¿Por qué lo añoramos? Antes que nuestra compañera psicóloga nos dé una respuesta, tenemos que entender que en nuestro cerebro, en nuestra cabecita, existe una gran cantidad de neuronas y células que son las responsables de guardar todos nuestros pensamientos, todos nuestros recuerdos, inclusive todas las percepciones que tenemos, que son las percepciones pues como miramos al mundo, como nos miramos nosotros a través de eso.
Por eso es que todo lo guardamos en la cabecita, pero creo que nuestra compañera nos va a dar una mejor explicación.
Pues exactamente, a veces como bien lo dice, tener esa remembranza, recordar, nos lleva a sentir ese placer, esa nostalgia, llenarnos en ese momento.
Cuando ya nos empieza a afectar, que es, no logro ser feliz, no logro salir de esta etapa, ya me está afectando corporalmente, en mi vida diaria es una alerta.
Y esa alerta nos lleva a sufrir dolores corporales, pérdida de memoria, no estar atento en lo que estamos haciendo, depresivo, enfermedades, dolores crónicos, dolores corporales y no entendemos que somos uno solo, que somos un solo cuerpo, un solo ser que va conectado a todo. Esa nostalgia cuando la vivimos con inteligencia, que es como que alguien vaya pasando con el aroma, me recuerda que así olía a mi abuelita y me hace sentir esa calidez y esa cosa bonita, de ¡ay mi abuelita! Y ya pasa a lo que sigue, voy a dirigirme a tal lado o estoy haciendo tal actividad. En el momento que de ahí empiezo a llorar.