Del 13 al 20 de agosto se celebrarán las tradicionales “Jornadas Brucknerianas” (en alemán, “Brucknertage”), en la milenaria Abadía de San Florián (en las proximidades de Linz, la capital de Öberösterreich -Alta Austria-), en este año especial por cumplirse su vigésimo aniversario. De las sinfonías del maestro de Ansfelden (un pueblito a camino entre Linz y San Florián), se interpretará la nº 5, “La Católica”, a cargo de la Altomonte Orchester (la orquesta misma de San Florián) y bajo la dirección de Rémy Bellot.
En función de ello, quisiera sumarme desde este canal al evento para, en un primer lugar, divulgarlo entre el público de habla hispana como se merece; y en segundo lugar, aprovechar la ocasión para incorporar algunos audios al podcast. Éste primero, y bajo los sones de esa misma sinfonía nº 5 (en la versión con la que ya contamos audios atrás, del Maestro Celibidache), con el propósito introductorio de destacar la importancia que habría tenido la Abadía y sus agustinos para la vida y obra, para, en definitiva, la entera formación espiritual y profesional de Anton Bruckner, que es la causa por la que se celebran en tal sede las Jornadas.
El hecho de que los restos del compositor reposen justamente, y como pidiera en vida, debajo del gran órgano de la Abadía (hoy llamado “Brucknerorgel”) es consecuencia de ello, como las propias Jornadas. Sería desde ese monumental instrumento que se oirían las primeras obras de Bruckner, y a su través, su ideal sonoro; “ideal sonoro que para muchos deriva del lenguaje del órgano, aunque no sería del todo improbable que Bruckner hubiera elegido el órgano y los metales porque ambos expresaban su vasto sonido interior”, apunta el autor y director argentino Eduardo Storni en la más completa monografía que existe hasta hoy en español, y eso que ya han pasado cuarenta años desde su original publicación (exactamente, “Bruckner: el cantor de Dios”, Madrid, Espasa Calpe, 1977, p. 32).
Comentarios