Hechos de los apostoles capitulos 25 y 26.
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Hechos 25
25:1 -- Llegado, pues, Festo a la provincia, subió de Cesarea a Jerusalén tres días después -- "Esto es, en el día tercero, con un día de reposo entre medio. Precisamente el lenguaje empleado de la resurrección de Jesús 'después de tres días' = 'al tercer día'. Así por uso común tanto entonces como ahora" (ATR). Subió a Jerusalén porque era necesario que los gobernadores romanos tuvieran buenas relaciones con la gente que era gobernada por ellos.
25:2 -- Y los principales sacerdotes y los más influyentes de los judíos ("los ancianos", vers. 15) se presentaron ante él contra Pablo, -- El hombre es conocido no solamente por sus amigos sino también por sus enemigos. La exagerada oposición contra Pablo es clara evidencia de su tremenda influencia.
-- y le rogaron (instaban, LBLA) -- De una vez los judíos le hacían la petición que para ellos era la más urgente de todas. Querían que esto fuera uno de los primeros actos oficiales de Festo (Reese). Festo entendía que por causa de las quejas de los judíos, Félix había sido depuesto, y que para tener buenas relaciones con ellos le convendría concederles su petición. Los judíos querían convencer al juez de que fuera partidario de ellos. ¿Qué clase de juez permitirá que la gente presente su caso contra algún individuo antes de que éste tenga un juicio imparcial?
25:3 -- pidiendo contra él, como gracia (un favor, LBLA) que le hiciese traer a Jerusalén; preparando ellos una celada (emboscada, LBLA, 23:16) para matarle en el camino. -- Pedían un solo favor: como la mujer de Herodes quería la cabeza de Juan el bautista estos judíos querían la cabeza de Pablo. Si Festo les hubiera hecho este favor, habría sido muy popular con los oficiales judíos. Probablemente tuvieran mucha esperanza de que se les concediera esta petición, ya que su influencia con Roma había sido lo suficientemente grande como para deponer a Félix.
25:4 -- Pero Festo respondió que Pablo estaba custodiado en Cesarea, adonde él mismo partiría en breve. -- Al decir esto, Festo parecía ser un oficial sabio y firme, pero después mostró su debilidad ante la presión creada por los judíos. Le convenía en ese momento decir a los judíos que Pablo era un ciudadano romano y que, por eso, no debería ser juzgado en Jerusalén sino en Cesarea.
25:5 -- Los que de vosotros puedan (los más influyentes de vosotros, LBLA), dijo, desciendan conmigo, y si hay algún crimen en este hombre, acúsenle. -- Los judíos no dejaban de acusar a Pablo (22:30; 23:30; 24:2, 8, 13; 25:5, 11, 16, 18; 26:2, 7), y él no dejó de imitar a Jesús (1 Ped. 2:21-23).
25:6, 7 -- Y deteniéndose entre ellos no más de ocho o diez días, venido a Cesarea, al siguiente día se sentó en el tribunal, y mandó que fuese traído Pablo. Cuando éste llegó, lo rodearon los judíos (¿para intimidarlo?) que habían venido de Jerusalén (esta vez sin abogado), presentando contra él muchas y graves (pesadas) acusaciones --Lucas no las narra pero, según la respuesta de Pablo en el siguiente versículo, le acusaban de herejía, sacrilegio y sedición. "Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo" (Mat. 5:11).
-- las cuales no podían probar; -- ¡Cuántas personas, aun hermanos en Cristo, creen que al levantar la voz y decir la misma cosa repetidas veces, pueden probar una cosa aunque no sea cierta! No hay nada que pueda substituir la prueba. Los judíos presentaron acusaciones pesadas, pero no presentaron pruebas ni siquiera de las más ligeras.
25:8 -- alegando Pablo en su defensa: Ni contra la ley de los judíos, -- "Mas tarde, ante Agripa, hará ver que su mensaje apostólico contiene la quintaesencia de la Ley y de los profetas" (Trenchard).
-- ni contra el templo, ni contra César he pecado en nada. -- Compárese la acusación contra Jesús (Luc. 23:2; Jn. 19:12) y contra Pablo en Tesalónica. Los judíos de Jerusalén hacían este cargo contra Pablo para que Festo le condenara, pero al mismo tiempo querían que lo llevara a Jerusalén, "preparando ellos una emboscada para matarle en el camino" (vers. 3). Obraban contra sí mismos, porque al acusarle de pecar contra el César, inevitablemente tendría que ser juzgado por los romanos. Festo ya había consentido a los judíos, ya había escuchado sus acusaciones y entendía que las acusaciones no tenían nada que ver con crímenes contra Roma, sino solamente con asuntos de la religión de los judíos. Por lo tanto, le convenía a Festo poner a Pablo en libertad (26:32), pero Pilato, Félix, Festo y otros romanos practicaban una "justicia" diferente entre los judíos, hasta el año 70 d. de J. C. cuando se agotó toda la paciencia de Roma y el general Tito puso sitio a Jerusalén para acabar con el problema judaico.
25:9 -- Pero Festo, queriendo congraciarse con (queriendo hacer un favor a, LBLA) los judíos (24:47), -- Festo no quería congraciarse con el apóstol Pablo, uno de los más importantes hombres del mundo entero, mucho más importante que el emperador de Roma.
-- respondiendo a Pablo dijo: ¿Quieres subir a Jerusalén, y allá ser juzgado de estas cosas delante de mí? -- Esto es lo que los judíos pedían, vers. 3. Esta pregunta de Festo claramente indicaba la inocencia de Pablo, porque si lo hubiera encontrado culpable de los cargos, ¿por qué hablar de subir a Jerusalén? Si Pablo hubiera sido culpable de los cargos, allí mismo en Cesarea Festo lo habría condenado. Ahora pregunta si Pablo quiere subir a Jerusalén pero ¿por qué? Si no quería juzgarle con justicia en Cesarea, mucho menos lo haría en Jerusalén. Pilato, Félix y Festo violaban la justicia romana para aplacar a los judíos. Querían "congraciarse con los judíos" porque tenían miedo de ellos, sabiendo que los judíos eran un pueblo violento, uno de los más violentos del imperio, y que estaban dispuestos a morir por lo que consideraban su causa justa. Tenían temor de ellos porque fácilmente se alborotaban y, para no perder su puesto (o su cabeza), el gobernador tenía que controlarlos. Félix ya había sido depuesto por Roma y Festo le seguiría pronto si no pudiera mantener la paz. Por eso, quería saber si Pablo estuviera dispuesto a olvidar su derecho como romano y volver a Jerusalén para ser juzgado otra vez por los judíos. Festo dijo, "¿Quieres ... ?" porque legalmente no podía entregarle a los judíos. Su pregunta equivalía a otra: ¿Quieres cometer suicidio? Claudio Lisias ya había sacado a Pablo de Jerusalén para evitar una emboscada y lo llevó a Cesarea, protegido por un ejército; entonces, ¿qué esperanza había de que Pablo llegara a Jerusalén con vida?
25:10 -- Pablo dijo: Ante el tribunal de César estoy, donde debo ser juzgado. A los judíos no les he hecho ningún agravio, como tú sabes muy bien (vers. 18, 25) -- Pablo podía hablar con denuedo porque sabía que era inocente. Abiertamente, delante de los judíos a los que Festo quería impresionar, Pablo reprendía la vacilación del gobernador.
25:11 -- Porque si algún agravio, o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir; -- Pablo respetaba y honraba la ley y reconocía lo justo de la pena de muerte por ciertos crímenes. En su carta a los romanos dice que el gobierno civil "no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo" (Rom. 13:4). Al decir que "no en vano lleva la espada" se refiere a la pena de muerte. Dios es el autor de esta ley: "El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada" (Gén. 9:6).y esa ley sigue vigente en todos los tiempos. Es deber de los gobiernos ejecutar a los criminales reincidentes en los mismos crímenes, pero el problema es que muchas veces los gobernantes son mas delincuentes que los mismos acusados.
-- pero si nada hay de las cosas de que éstos me acusan, nadie puede entregarme a ellos. -- A César apelo (28:19). -- El ejemplo de Pablo muestra que el cristiano puede insistir en que se respeten sus derechos. Compárese Jn. 18:23. No había justicia en Jerusalén, ni en Cesarea; por eso, tendría que ir a Roma. Era muy obvio que ni los judíos ni Festo le juzgarían con justicia; por eso, le quedaba solamente la alternativa de apelar a César (la Corte Suprema) para salvar su vida. Con la excepción de los peores criminales -- p. ej., asesinos, piratas, etc. -- todo ciudadano romano que no era juzgado justamente en algún tribunal provincial, tenía el derecho de apelar a César. Como ciudadano romano Pablo aprovechaba ese derecho. No iría a Jerusalén sino a Roma. "Nadie puede", es decir, nadie "'Puede' legalmente. Pablo es un ciudadano romano, y ni siquiera Festo podia quitarles ese derecho. Pablo quería ir a Roma (Rom. 1:9-11), pensaba ir a Roma (19:21) y, sobre todo, el Señor le había dicho que testificaría de El en Roma (23:11). Al apelar a Roma, Pablo se libraría de los judíos fanáticos que estaban resueltos a darle muerte y también del gobernador romano cuyo deseo de complacer a los judíos le obligaba a sacrificar la justicia romana.
"'Apelo a César. En lugar de ser entregado a los judíos permita que yo sea entregado a Nerón'. Es un caso duro cuando por causa de los que se llaman la simiente de Abraham, un hijo de Abraham es forzado a apelar a un Nerón, y tenga más seguridad en Roma que en Jerusalén" (Henry). "
25:12 -- Entonces Festo, habiendo hablado con el consejo (no con judíos, sino con el concilio romano, asesores del gobernador), respondió: A César has apelado; a César irás (19:21; 23:11; Rom. 15:22-28). -- Esto causó un problema serio para Festo, porque este era el primer juicio presidido por él y resultó en la apelación a César. Normalmente los romanos apelaban a César cuando no había justicia en los tribunales provinciales. Por eso, la apelación de Pablo a César no era favorable para Festo, y el asunto se complicaba más porque se requería un cargo formal y hasta ese momento no lo había. Si hubiera puesto a Pablo en libertad cuando se dio cuenta de su inocencia, no habría tenido tantos problemas ahora. Su deseo de congraciarse con los judíos le estaba costando mucho.
25:13 -- Pasados algunos días, el rey Agripa y Berenice vinieron a Cesarea para saludar a Festo. -- Este Agripa era Herodes Agripa II, el último de los Herodes. Gracias a los romanos, era rey sobre Galilea, Perea y otras áreas pequeñas de Palestina. Habiendo sido criado en Roma, era muy leal a Roma. Berenice era hermana de Agripa y también de Drusila, quien era esposa de Félix. "Agripa tenía fama de ser un experto en asuntos concernientes a la religión judía. Entre otras, tenía la facultad de nombrar y destituir a los sumos sacerdotes judíos, y de ahí que haya sido algunas veces llamado, no muy acertadamente, 'la cabeza secular de la iglesia judía'" (Bruce).
25:14-16 -- Y como estuvieron allí muchos días, Festo expuso al rey la causa de Pablo, diciendo: Un hombre ha sido dejado preso por Félix, respecto al cual, cuando fui a Jerusalén, se me presentaron (acusaciones contra él, LBLA) los principales sacerdotes y los ancianos de los judíos, pidiendo condenación contra él. (Querían convencerle que Pablo era un hombre muy peligroso, pero véase el vers. 25). A éstos respondí que no es costumbre de los romanos (como si tal vez hubiera sido costumbre de los judíos) entregar alguno a la muerte antes que el acusado tenga delante a sus acusadores, y pueda defenderse de la acusación. -- Pero aunque los judíos no podían probar sus acusaciones contra Pablo, Festo no le puso en libertad como la justicia demandaba. Al hablar de la "costumbre de los romanos" este gobernador cobarde hacía burla de la justicia romana. ¿Era costumbre de los romanos detener a alguno aun después de que confrontara a sus acusadores y éstos no pudieran probar ninguna de sus acusaciones? ¿Era costumbre de los romanos de que un oficial (como Félix) custodiara a alguno con la esperanza de que comprara su libertad? ¿Era costumbre de los romanos de que algún oficial (como Festo) menospreciara la justicia para congraciarse con los judíos?
25:17-19 -- Así que, habiendo venido ellos juntos acá, sin ninguna dilación, al día siguiente, sentado en el tribunal, mandé traer al hombre. Y estando presentes los acusadores, ningún cargo presentaron de los que yo sospechaba, (compárese 18:12-16; por ejemplo, actos de sedición contra Roma, o crímenes contra el templo de los judíos)sino que tenían contra él ciertas cuestiones acerca de su religión (deisidaimonías) -- Esta palabra puede ser traducida superstición o religión, pero como Pablo no la hubiera usado para insultar a los atenienses (17:22), tampoco Festo para insultar al rey Agripa.
-- y de un cierto Jesús, ya muerto, el que Pablo afirmaba (continuamente) estar vivo. -- Festo ni siquiera entendía la diferencia entre la religión de Pablo y la de los otros judíos. Aprendemos aquí que Pablo había hablado no solamente de la crucifixión de Jesús, sino también de su resurrección. Festo no entendía nada de eso pero, por lo menos, había escuchado la defensa de Pablo. El expresó su indiferencia hacia la muerte y resurrección de Jesús, como si esos eventos tan importantes no le afectaran a él, pero Dios exaltó a Cristo "hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla" (Fil. 2:9, 10). Esto incluye a Festo.
25:20 -- Yo, dudando en cuestión semejante (estando yo perplejo cómo investigar estas cuestiones, LBLA), le pregunté si quería ir a Jerusalén y allá ser juzgado de estas cosas (aquí ni siquiera agrega "delante de mí", vers. 9). -- Lucas explica la razón verdadera de su pregunta: quería congraciarse con los judíos (vers. 9), pero un verdadero juez romano hubiera hecho como Galión quien "los echó del tribunal" (18:16). Al decir que él estaba perplejo cómo investigar estas cuestiones, tal vez quisiera justificarse o disculparse por no haber puesto en libertad a Pablo.
25:21 -- Mas como Pablo apeló para que se le reservase para el conocimiento de Augusto, mandé que le custodiasen hasta que le enviara yo a César. -- Augusto no era un nombre propio sino un título de los emperadores que indicaba divinidad.
25:22 -- Entonces Agripa dijo a Festo: Yo también quisiera oír a ese hombre. -- Agripa ya sabía bastante acerca del Camino (26:26). Su bisabuelo era el que trató de matar a Jesús; su tío mató a Juan el bautista y juzgó a Jesús; su padre mató a Jacobo y quería matar a Pedro.
-- Y él le dijo: Mañana le oirás. "Este deseo de Agripa hizo posible la ocasión para la defensa más noble que jamás se haya oído delante de cualquier tribunal, y para una elocuencia tan espléndida como la que se pueda encontrar en cualquier idioma. Véase el cap. 26" (Barnes).
25:23 -- Al otro día, viniendo Agripa y Berenice con mucha pompa (¿no recordaron lo que le había costado el orgullo de su padre? 12:23), y entrando en la audiencia con los tribunos y principales hombres de la ciudad, por mandato de Festo fue traído Pablo. -- Lucas no suple más detalles de este grupo pero, como dice Barclay, "Seguramente estaban revestidos con los mantos reales de púrpura y llevaban sobre sus cabezas las coronas de oro. Sin duda alguna, para la ocasión Festo habría vestido la túnica escarlata que todo gobernador lucía en ocasiones de ese tipo. El séquito de Agripa debió haber estado cercano, como así también las figuras judías de más influencia. Cerca de Festo estarían los capitanes que comandaban las cinco cohortes apostadas en Cesarea; y en el fondo debía haber una sólida falange de legionarios romanos de gran estatura, como guardia ceremonial".
Jesús había dicho a sus apóstoles que "Aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles" (Mat. 10:18). Dijo a Ananías acerca de Saulo de Tarso, "Instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel" (9:15). Ahora se cumplen esas profecías.
"La providencia divina ordenaba estas circunstancias para que el embajador del Cielo pudiese dar su mensaje y testimonio ante un auditorio compuesto de la aristocracia de Palestina de la época. Aquí su testimonio como 'embajador en cadenas' llega a su culminación en lo que se refiere a Palestina" (Trenchard).
25:24 -- Entonces Festo dijo: Rey Agripa, y todos los varones que estáis aquí juntos con nosotros, aquí tenéis a este hombre, respecto del cual toda la multitud de los judíos me ha demandado en Jerusalén y aquí, (parece que los judíos de Cesarea tomaban parte en el asunto) dando voces que no debe vivir más. -- Los judíos "influyentes" le habían convencido que todos los judíos decían que Pablo debía morir. No tomaron en cuenta los muchos judíos cristianos.
25:25 -- Pero yo, hallando que ninguna cosa digna de muerte ha hecho, y como él mismo apeló a Augusto, he determinado enviarle a él. -- Vers. 18. Si Festo había hallado que "ninguna cosa digna de muerte ha hecho", ¿por qué le preguntó si quería ir a Jerusalén?
Aquí está otro de los varios oficiales romanos que testificaban que Pablo era inocente.
25:26 -- Como no tengo cosa cierta (definida, LBLA; nada en concreto) que escribir a mi señor (otro título del emperador), -- "Todas las acusaciones del Sanedrín se desvanecieron o tropezaron con Pablo. Festo confiesa aquí que no le quedaba nada, y por ello se traiciona a sí mismo como culpable de una burda insinceridad en su proposición a Pablo en el versículo 9 acerca de ir a Jerusalén. Por su propia declaración tenía que haber liberado a Pablo" (ATR).
-- le he traído ante vosotros, y mayormente ante ti, oh rey Agripa, para que después de examinarle (de que se le interrogue, LBLA) tenga yo qué escribir. -- No era, pues, un juicio, sino solamente una oportunidad para que el rey Agripa escuchara la defensa de Pablo con el propósito de ayudar a Festo a formular un cargo oficial contra Pablo.
25:27 -- Porque me parece fuera de razón (absurdo, LBLA) enviar un preso, y no informar de los cargos que haya en su contra. -- Probablemente Pablo sería el primer preso que llegaría a Roma para apelar a la corte suprema del imperio sin que hubiera cargo formal contra él. Festo entendía que todas las acusaciones de los judíos eran simplemente una disputa religiosa, pero estaba resuelto a fabricar una acusación contra Pablo de algún crimen contra Roma, para que el caso no pareciera absurdo ante los ojos del emperador.
Hechos 26
26:1 -- Entonces Agripa (ahora Agripa preside) dijo a Pablo: Se te permite hablar por ti mismo (en tu favor, LBLA) -- Esto no era un juicio en el sentido ordinario, porque al apelar al César, Pablo ya no podía tener ningún juicio oficial en tribunales inferiores. En realidad Pablo podía haber rehusado presentar su defensa delante de Agripa. Festo ya había declarado que Pablo era inocente (25:18, 25), y solamente quería la ayuda de Agripa para la formulación de algún cargo contra Pablo que pudiera presentarse ante la suprema corte romana. Se le concedió a Pablo, pues, que hablara lo que quisiera en su propio favor. Agripa no le estaba acusando ni interrogando, sino que solamente quería oír la defensa de Pablo. Si el testimonio de Pablo hubiera creado dudas en la mente de Agripa (o de Festo), habría habido preguntas, pero su testimonio era muy abierto y muy claro. Como dice Lenski, "Ni Festo ni Agripa hablaron como Cornelio había hablado a Pedro aquí en Cesarea: 'Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado" (10:33).
-- Pablo entonces, extendiendo la mano, comenzó así su defensa: -- 1 Ped. 3:15. La defensa de Pablo era la narración de su conversión a Cristo y, de esa manera, realizó la obra prescrita para él ("llevar mi nombre en presencia de los ... reyes", 9:15). Es semejante al discurso que entregó en Jerusalén sobre las gradas de la fortaleza, pero en esta ocasión suple detalles adicionales. "Su discurso es una obra maestra de noble apologética" (ATR).
Probablemente algunos de los oficiales romanos y judíos se hubieran reunido para divertirse. El caso era excepcional y, por eso, algo interesante. ¿Qué dirá este judío delante de una asamblea tan importante? Después de escuchar la defensa de Pablo, los oyentes se dieron cuenta de que que en lugar de juzgar a Pablo, ellos mismos habían sido juzgados. Posiblemente alguno de ellos habrá dicho, "No me vuelvan a invitar a escuchar a ese prisionero, porque no salí nada divertido".
26:2 -- Me tengo por dichoso (makarios, bienaventurado, Mat. 5:3), oh rey Agripa, de que haya de defenderme hoy delante de ti de todas las cosas de que soy acusado por los judíos. -- "Si hubiera tenido conciencia de culpa, habría tenido temor de ser juzgado en la presencia de un hombre que conocía todos los hechos, pero esta es una marca de una conciencia limpia, de no solamente no retirarse de un juez que tiene conocimiento correcto de las circunstancias, sino también de regocijarse y considerarse a sí mismo dichoso" (Crisóstomo, citado por Knowling).
26:3 -- Mayormente porque tú conoces (eres experto en, LBLA) todas las costumbres y cuestiones (controversias, LBLA; compárese 15:2) que hay entre los judíos; --Agripa podía entender todo lo que Pablo diría acerca de la ley y los profetas y de todo aspecto de la religión y las sectas de los judíos.
-- por lo cual te ruego que me oigas con paciencia. -- Sin duda Lucas tenía que abreviar los discursos de este libro. Probablemente la defensa de Pablo duró mucho más tiempo que los pocos minutos que se requieren para leer Hechos 26:2-29.
26:4-6 -- Mi vida, pues, desde mi juventud, la cual desde el principio pasé en mi nación, en Jerusalén, la conocen todos los judíos; (22:3; Gál. 1:14) los cuales también saben que yo desde el principio, si quieren testificarlo, conforme a la más rigurosa ("un verdadero superlativo", ATR) secta de nuestra religión, viví fariseo. Y ahora, por(Lit., en base a) la esperanza de la promesa que hizo Dios a nuestros padres soy llamado a juicio; -- Los padres esperaban la resurrección y mucho más: "Es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna" (Heb. 9:15).
¡Qué situación tan contradictoria! ¡Qué ironía! ¡Un verdadero hijo de Abraham (Gál. 3:27-29) es "llamado a juicio" por haber creído la promesa a Abraham! Cuando Pablo vivió como fariseo en Jerusalén, no le persiguieron por creer esta promesa.
26:7 -- promesa cuyo cumplimiento esperan que han de alcanzar nuestras doce tribus, -- Esta era la "designación honorable de la nación en conjunto" (Meyer). Simeón y Ana eran ejemplos de los israelitas fieles que esperaban la promesa (Luc. 2:25, 26; 35-38). Aunque diez tribus se rebelaron contra Roboam, muchos (un remanente fiel) volvieron a Jerusalén. "Acudieron también de todas las tribus de Israel los que habían puesto su corazón en buscar a Jehová Dios de Israel; y vinieron a Jerusalén para ofrecer sacrificios a Jehová, el Dios de sus padres" (2 Crón. 11:16). Por eso, Pablo habla de "nuestras doce tribus".
-- sirviendo constantemente (Lit., celosamente, intensamente) a Dios de día y de noche. Por esta esperanza, oh rey Agripa, soy acusado por los judíos.
26:8 -- ¡Qué! ¿Se juzga entre vosotros cosa increíble que Dios resucite a los muertos? -- Como dice La Biblia de las Américas, "¿Por qué se considera increíble?" Ahora Pablo dice vosotros; no se dirige solamente a Agripa, sino a todos, porque los saduceos (Mat. 22:23-33) y los gentiles (17:32) se burlaban de la resurrección. A estos Pablo dice, "¿Por qué se considera increíble?" Presentamos evidencia para que otros crean, pero también conviene preguntarles, ¿por qué no creen? Pablo no está hablando de los dioses paganos, sino del Dios Vivo, el Creador del mundo. ¿Por qué no creen que El resucita a los muertos? Lo ha hecho en el pasado, y en el Día Final levantará a todos los muertos.
26:9 -- Yo ciertamente había creído mi deber hacer muchas cosas contra el nombre de Jesús de Nazaret (2:22; 3:6; 4:10); -- Ahora explica cómo se convirtió (1 Tim. 1:13). El había sido exactamente como los judíos que ahora le persiguen a él. Había tenido el mismo prejuicio contra los cristianos que ellos tenían.
26:10 -- lo cual también hice en Jerusalén. Yo encerré en cárceles a muchos de los santos (cuando les perseguía, no hablaba de ellos como santos sino como herejes), habiendo recibido poderes de los principales sacerdotes; -- Pablo no era un perseguidor solamente por su propia cuenta sino un perseguidor oficial, bajo la autoridad y dirección del Sanedrín. Los principales sacerdotes eran saduceos y Pablo era fariseo, pero las dos sectas se unían en su persecución contra la iglesia.
-- y cuando los mataron (Esteban, 8:1, y otros como él, 9:1), yo di mi voto. -- La expresión "di mi voto" (literalmente, eché mi piedra) no debe entenderse en sentido literal sino figurado. Algunos creen que debe entenderse literalmente y, por eso, concluyen que Pablo, como miembro del Sanedrín, dio su voto contra Esteban. Pero esta conclusión no es una inferencia necesaria, sino una conclusión ilógica, porque Pablo tenía mucho contacto con el Sanedrín (7:58-8:3; 9:1 y a través de Hechos) y, sin duda, si hubiera sido miembro, él o Lucas lo habrían mencionado. Según 1 Cor. 7:7, Pablo no estaba casado, pero si se supone que era miembro del Sanedrín, también sería necesario suponer que en ese tiempo estaba casado, y que después llegó a ser viudo. Esto es suponer demasiado, basándose solamente en la frase "di mi voto", cuando lógicamente esta frase se puede entender como "di mi aprobación". El era un perseguidor oficial, autorizado y comisionado por el Sanedrín y, por eso, los miembros del concilio seguramente tomaban en cuenta el pensar de él.
26:11 -- Y muchas veces, castigándolos en todas las sinagogas (Mat. 10:17; 23:34; Mar. 13:9) los forcé (obligaba, VHA) a blasfemar; -- La Biblia de las Américas dice,procuraba obligarlos; la Versión Moderna dice, les hacía fuerza para que blasfemasen. Los que creen que Pablo solamente procuraba obligar a los cristianos a blasfemar pero que no podía hacerlo citan 22:4, "Perseguía yo este camino hasta la muerte"; creen que esto indica que, en lugar de blasfemar a Cristo, algunos murieron por su fe. Sin duda muchos murieron en lugar de negar a Cristo, pero el verbo traducido forcé o procuraba obligar es anankazo, "constreñir, ya mediante amenazas, peticiones, fuerza, persuasión o torturas; evidentemente pablo usaba esos medios en el tiempo que permanecio como perseguidor de la iglesia. Cristo 'hizo' entrar a los discípulos en una barca, RV, RVR (RVR77, VHA, V.M., 'obligó'), Mt 14:22; ... el siervo del hombre que preparó una gran cena debía forzar a la gente a entrar; Saulo de Tarso forzaba a los santos a blasfemar ... ; Tito, aunque griego, no fue obligado a circuncidarse, Gá 2:3" (Vine). "Conativo imperfecto de anagkazo ... Este tiempo, como el imperfecto en Mt. 3:14; Lc. 1:59, deja lugar a la esperanza de que Pablo no consiguiera lograr sus fines, porque ya ha dicho antes que llevó a muchos 'hasta la muerte' (22:4)" (ATR). La palabra conativo viene de conato, y significa empeño, esfuerzo. Knowling dice que "el imperfecto lo deja dudoso en cuanto a si el perseguidor tuviera éxito o no en sus esfuerzos. El imperfecto puede ser entendido como conativo, Burton, p. 12, cf. Lucas 1:59, Mat. 3:14. Blass dice que puede tener la fuerza de acción continua, pero aunque sea así, no dice que la compulsión era efectiva". Lenski explica que como el tiempo de este verbo es imperfecto, también lo es el verbo que sigue (perseguí), y que no es consecuente concluir que el primero sea conativo y que el otro sea iterativo (que repite); dice que es posible, pero que sería "muy curioso". Así es que, en realidad, como dice Meyer, la cuestión de si, en realidad, Pablo lograra que algunos cristianos blasfemaran a Cristo no se puede resolver.
-- -y enfurecido sobremanera contra ellos, los perseguí hasta en las ciudades extranjeras.- La palabra perseguir significa seguir en pos de, como cazador. Perseguía a los cristianos porque creían que eran apóstatas (herejes).
-- hasta en las ciudades extranjeras. -- Ya había ido a otras ciudades extranjeras antes de ir a Damasco. Esto debería convencer al rey Agripa que Pablo había sido aun más severo en su persecución que los judíos que le acusaban, porque ellos se concentraban principalmente en matar a Pablo, pero él había trabajado extensamente para perseguir a todos los cristianos, aun en "las ciudades extranjeras".
Al oír esto, los oyentes debieran de estar pensando, "Si tú perseguías con tanta furia a los cristianos, ¿por qué dejaste de hacerlo? y ¿cómo puedes predicar lo que antes destruía?"
26:12-14 -- Ocupado en esto, iba yo a Damasco con poderes y en comisión de los principales sacerdotes, cuando a mediodía, -- 22:6. Hay detalles nuevos en este discurso (ver. 14), no encontrados en los otros relatos (capítulos 9, 22): "habiendo caído todos nosotros en tierra"; que la voz hablaba en lengua hebrea; y las palabras, "Dura cosa te es dar coces contra el aguijón", (esta frase en 9:5 en la versión RVR60 no es genuina sino una interpolación). Este proverbio no se encuentra en la literatura hebrea, pero es común en la literatura griega y latina.
-- oh rey, yendo por el camino, vi una luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del sol, la cual me rodeó a mí y a los que iban conmigo. Y habiendo caído todos nosotros en tierra, oí una voz que me hablaba, y decía en lengua hebrea: (No explicó este detalle en el cap. 22 porque en esa ocasión él mismo hablaba a la gente en hebreo)Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón. -- Este texto enseña claramente que los que persiguen a Cristo y sus seguidores se perjudican a sí mismos. "¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan cosas vanas? Se levantarán los reyes de la tierra, y príncipes consultarán unidos contra Jehová y contra su ungido, diciendo: Rompamos sus ligaduras, y echemos de nosotros sus cuerdas. El que mora en los cielos se reirá; el Señor se burlará de ellos. Luego hablará a ellos en su furor, y los turbará con su ira" (Sal. 2:1-5; véase Hech. 4:25, 26). De hecho le aguijoneaban a Pablo la ley y los profetas que él rehusaba estudiar objetivamente y sin prejuicio. El persistía en los prejuicios de los judíos con respecto al Mesías y su reino (2 Cor. 3:16), y al hacerlo se lastimaba cada vez más. Algunos suponen erróneamente que la conciencia de Saulo ya le estaba molestando, pero esta interpretación contradice lo que él dice en 23:1 y 24:16; no significa que violaba su conciencia, sino que su ignorancia e incredulidad (1 Tim. 1:12) le atormentaban.
26:15-18 -- Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Pero levántate, y ponte sobre tus pies; -- pero no podía caminar sin que alguien le guiara; en este discurso no habla de haber estado ciego por tres días.
-- porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto (Pablo era testigo de la resurrección de Cristo, (1:22; 22:14; 1 Cor. 9:1), y de aquellas en que me apareceré a ti, (18:3; 23:11; 2 Cor. 12:2). -- El testimonio de algunos de los testigos de Cristo les costó su vida; por eso, la palabra testigo,mártus, también significa mártir, "uno que da testimonio mediante su muerte" (Vine) (Apoc. 17:6; LBLA dice testigos).
-- librándote de tu pueblo, y de los gentiles (continuamente el Señor lo hacía, como se ve a través de Hechos), a quienes ahora te envío, para que abras sus ojos, --"Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyeron pesadamente, y sus ojos han cerrado, para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan de corazón, y se conviertan, y yo los sane" (28:27). "Dios les dio espíritu de estupor, ojos con que no vean y oídos con que no oigan, hasta el día de hoy" (Rom. 11:8). Estos dos textos describen la ceguedad de los judíos. Rom. 1:21 describe la ceguedad de los gentiles: "Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido". "Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo" (2 Cor. 4:6). Los que abren los ojos son los que están dispuestos a ver su condición espiritual y entender lo que Dios requiere de ellos.
-- para que se conviertan de las tinieblas (la ignorancia, el pecado, la superstición, etc.) a la luz (el conocimiento pleno de Cristo, la luz del mundo, la perfecta Revelación del Padre), y de la potestad de Satanás (2 Cor. 11:14; Efes. 6:12; Col. 2:15; 2 Tes. 2:9) a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. -- Hacía todo esto por medio de la predicación del evangelio.
26:19 -- Por lo cual, oh rey Agripa, no fui rebelde -- Agripa sabía que todo judío sincero obedecía los mandamientos de Dios. Pablo no fue rebelde cuando Jesús le dijo, "Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer" (9:6), y no era rebelde cuando Ananías le dijo, "Levántate y bautízate, invocando su nombre" (22:16). Creía a Cristo, se arrepintió de sus pecados, y obedeció el mandamiento de bautizarse (2:38). "La gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos lo hombres, enseñándonos ... " (Tito 2:11, 12). La gracia de Dios enseñó a Pablo lo que debería hacer, y la gracia no es irresistible; Pablo pudiera haber rechazado el evangelio. Como dijo Esteban a los judíos, "Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo" (7:51).
-- a la visión celestial, -La palabra visión significa "aquello que es visto" (Vine). Pedro, Jacobo y Juan fueron testigos de la transfiguración de Jesús (Mat. 17:1-5) y "Cuando descendieron del monte, Jesús les mandó, diciendo: No digáis a nadie la visión, hasta que el Hijo del Hombre resucite de los muertos" (ver. 9). El texto paralelo de Lucas 9:32 explica la palabra visión: "Y Pedro y los que estaban con él estaban rendidos de sueño; mas permaneciendo despiertos, vieron la gloria de Jesús, y a los varones que estaban con él".
26:20 sino que anuncié primeramente a los que están en Damasco (9:20), y Jerusalén (9:29), y por toda la tierra de Judea (11:29, 30), -- No había tiempo para predicar "por toda la tierra de Judea" cuando Pablo fue a Jerusalén la primera vez (9:26), pues su propósito era visitar a Pedro y estuvo solamente unos quince días (Gál. 1:18, 19); tampoco hubo tiempo cuando subió a Jerusalén por causa del problema de los judaizantes (cap. 15); y, por último, fue prendido cuando subió a Jerusalén para entregar la colecta de las iglesias de Macedonia y Acaya para los santos pobres de Jerusalén (21:15; 24:17; Rom. 15:25-27; 1 Cor. 16:1-4). Por lo tanto, la única oportunidad que tenía de predicar "por toda la tierra de Judea" fue cuando él y Bernabé llevaron la ayuda de los discípulos de Antioquía a los hermanos de Judea (11:29, 30).
Este texto es otro que claramente refuta la enseñanza sectaria de que la iglesia de Jerusalén era una iglesia patrocinadora para administrar la ayuda a las iglesias de Judea.
-- y a los gentiles, que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento. -- Mat. 3:8. Esto es precisamente lo que Pablo había hecho (Rom. 2:21).
26:21 -- Por causa de esto los judíos, prendiéndome en el templo, intentaron matarme. -- 21:31; 9:29; 14:4, 19. Los judíos querían matar a Pablo porque El predicaba (1) que las Escrituras enseñan que el Mesías había de sufrir (17:3); (2) que Jesús de Nazaret era el Mesías que había de venir; (3) que por medio de Cristo y su sacrificio en el madero los judíos podían ser salvos y, de esa manera, demostrar que verdaderamente eran hijos de Abraham (Gál. 3:27-29); y (4) que los gentiles pueden ser salvos y llegar a ser hijos de Dios e hijos de Abraham y gozar de todos los honores y privilegios de hijos, sin llegar a ser judíos por medio de la circuncisión. Por eso, los judíos le aborrecían y querían darle muerte.
26:22, 23 -- Pero habiendo obtenido auxilio de Dios, persevero (estoy de pie, Fil. 4:1; Efes. 6:13) hasta el día de hoy, -- Pablo estaba consciente de la ayuda de Dios cuando fue apedreado en Listra, cuando fue encarcelado en Filipos, cuando fue llevado ante el tribunal en Corinto, y cuando los judíos alborotaron las ciudades de Tesalónica, Berea, etc. Sin duda recordaba siempre las palabras consoladoras del Señor: "No temas, sino habla, y no calles, porque yo estoy contigo" (18:9, 10) y "Ten ánimo, Pablo" (23:11). "No te desampararé, ni te dejaré; de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre" (Heb. 13:5, 6).
-- dando testimonio a pequeños (ya había predicado a muchos pequeños, 1 Cor. 1:26) y a grandes (Festo, Agripa), no diciendo nada fuera de las cosas que los profetas y Moisés dijeron que habían de suceder: Que el Cristo había de padecer, (Lit., sería sujeto a sufrimiento, LBLA, margen) -- Juan habló de Cristo como el Cordero de Dios, de acuerdo con Isa. 53:4, 5, 10, "Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado". "Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho ... y ser muerto" (Mat. 16:21). "Declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, que era necesario que el Cristo padeciese" (17:3). La cruz de Cristo era la piedra de tropiezo para los judíos, porque rehusaban aceptar que su Mesías vendría a la tierra para sufrir.
-- y ser el primero de la resurrección de los muertos (1 Cor. 15:20, "primicias de los que durmieron es hecho"; fue "el primero de la resurrección", porque ya no muere más), para anunciar luz al pueblo y a los gentiles. -- Luc. 2:32. Si Cristo no hubiera resucitado, no habría luz (1 Cor. 15:12-19).
26:24 -- Diciendo él estas cosas en su defensa, Festo a gran voz dijo: Estás loco, Pablo (compárese 2:13, "Están llenos de mosto"); las muchas letras te vuelven loco. --Pablo se dirigía al rey (26:1, 7, 19), pero Festo le escuchaba porque no tenía "cosa cierta que escribir" acerca de Pablo a su "señor" (el emperador). La expresión "estas cosas" se refiere a toda la defensa de Pablo. Pablo había explicado lo que pasó en el camino a Damasco, afirmó la resurrección de Cristo (para Festo "un cierto Jesús, ya muerto, el que Pablo afirmaba estar vivo", 25:19), y aun se atrevió a decir que este Jesús resucitó para anunciar luz no solamente a los judíos sino también aun a los gentiles.
Festo tuvo que formular una carta para Roma especificando algún cargo contra Pablo, pero a estas alturas no tenía esperanza de poder hacerlo, y para él "estas cosas" que Pablo decía solamente pudieran proceder de un cerebro enfermo. Cuando Pablo hablaba de estar "locamente enfurecido" (ver. 11) contra los cristianos, Festo creía que era un hombre muy inteligente, pero cuando hablaba de la resurrección de Cristo, etc., pensaba que estaba loco.
"Si Pablo solamente está delirando, si su mente está desequilibrada, eso disculpa a Festo y él puede hacer a un lado todo lo que Pablo dice ... La palabra de Festo no es sincera. Si él realmente hubiera creído que Pablo estaba mentalmente desequilibrado, no le habría gritado, sino que le habría sonreído con compasión ... Si Pablo hubiera estado loco, el caso automáticamente habría terminado a pesar de la apelación de Pablo al César. Ningún gobernador hubiera enviado a un lunático a la corte del emperador" (Lenski).
En esto Pablo compartía el sufrimiento del Maestro, porque también decían que El estaba loco: "Muchos de ellos decían: Demonio tiene, y está fuera de sí; ¿por qué le oís?" Jn. 10:20.
Festo ya no quería oír más, pero le convenía seguir escuchando, porque todos los gentiles de la asamblea podían darse cuenta de que el Cristo, a quien Pablo predicaba, ofrecía grandes bendiciones a ellos también (26:17, 18, 20, 23).
26:25 -- Mas él dijo: No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. -- El evangelio, la verdad objetiva, no es locura (1 Cor. 1:18), sino la realidad. Son palabras de cordura (prudencia, juicio), porque el evangelio es la sabiduría de Dios (1 Cor. 1:24).
26:26 -- Pues el rey sabe estas cosas, delante de quien también hablo con toda confianza. Porque no pienso que ignora nada de esto; pues no se ha hecho esto en algún rincón. -- Jerusalén no es "algún rincón". No era invención de la mente enferma de Pablo sino un asunto tratado ampliamente por el Sanedrín de los judíos, por Herodes, rey de los judíos, y por Poncio Pilato, el gobernador romano.
26:27 -- ¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? -- Si creía a los profetas, la lógica le obligaba a creer lo que Pablo decía. Si rechazara a Pablo, rechazaría a los profetas y eso equivaldría a rechazar el judaísmo. En esta ocasión, ¿quién está juzgando a quién? El rey Agripa debía estar examinando a Pablo pero parece que Pablo lo está examinando a él. Compárese 24:25, no temblaba el prisionero sino el juez.
-- Yo sé que crees. -- Pero no podía decir, "Yo sé que aceptará el evangelio".
26:28 -- Entonces Agripa dijo a Pablo: -- Públicamente Pablo se dirigía a Agripa y, por eso, éste se vio obligado a decir algo. No podía negar lo que Pablo decía. En lugar de pedir a Festo y Agripa por su vida, Pablo hizo el papel de juez al predicarles la palabra de Dios que juzga a todos ahora como también lo hará en el Día Final (Jn. 12:47, 48).
-- Por poco me persuades a ser cristiano (11:26) (en poco tiempo me persuadirás a que me haga cristiano, LBLA; dice el margen: Con un poco). ¿Con un poco qué? ¿con pocas palabras? ¿con poco esfuerzo? ¿en poco tiempo? Quizás el tono de voz y la expresión de la cara del rey hayan dado a entender el significado de estas palabras, pero no estuvimos nosotros para observar tales cosas. "Con poco esfuerzo quisieras hacerme a mí cristiano" (Versión Moderna). "¡Con poco piensas hacerme cristiano!" (Versión Hispanoamericana). "Más probablemente, la idea es "en (o con) pequeño esfuerzo estás tratando de persuadirme a fin de hacerme cristiano" (ATR); él se supone que Agripa "Echa la cuestión a un lado con un encogimiento de hombros". Algunos suponen que habló con ironía pero esto no se puede probar, porque es posible que el rey fuera sincero.
Los comentaristas admiten que no es claro el sentido de las palabras usadas por Pablo (en oligoi). Sin embargo estas palabras del rey Agripa demuestran que él vio muy claramente el propósito del apóstol. Si el rey creía a los profetas (y Pablo dijo, "Yo sé que crees"), entonces el siguiente paso sería creer en Cristo y convertirse en cristiano.
Hech. 11:26 dice que "a los discípulos se les llamó cristianos por primera vez en Antioquía". Dice Pedro, "si alguno padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello" (1 Ped. 4:16). El nombre "cristiano" es muy apropiado para los discípulos de Cristo porque su significado claro es "seguidor de Cristo" (compárese "herodiano").
26:29 -- Y Pablo dijo: ¡Quisiera Dios que por poco o por mucho, no solamente tú, sino también todos los que hoy me oyen (25:23), fueseis tales cual yo soy ...Muchos creen que la respuesta de Pablo indica que Agripa era sincero. Pablo sinceramente quería que esos personajes eminentes (y todos) fueran como él, es decir, perdonados y regocijados con la paz de Dios en su corazón y con una esperanza viva pero, desde luego, no quería que estuviesen en cadenas como él. Compárese lo Pablo dice a los hermanos romanos acerca de los judíos (9:3; 10:1). El cristiano verdadero no es indiferente hacia los perdidos, sino que sinceramente desea y anhela su conversión. Posiblemente esto sea el gran defecto en nuestra evangelización, que en lugar de tener la actitud de Pablo, somos movidos principalmente por el sentido de deber y obligación. Los hermanos que son exitosos en la obra personal son los que quieren que sus conocidos sean como ellos, que gocen de esta maravillosa salvación ofrecida por nuestro Señor Jesucristo.
-- excepto estas cadenas! -- Esto indica que durante el discurso Pablo estaba custodiado con cadenas como un criminal, pero la audiencia podía ver claramente que él era un prisionero muy excepcional (ver. 31, 32).: Pablo estaba custodiado por cadenas literales pero era un hombre libre en Cristo, mientras que Festo, Agripa, Berenice y los otros funcionarios estaban libres de cadenas literales pero eran esclavizados (encadenados) por el pecado.
Pablo no quería que estos funcionarios estuvieran en cadenas como él. Solamente quería que fueran salvos y él hubiera estado contento de seguir en cadenas y dejarles a ellos sobre sus tronos (Ellicott).
¡Que fueseis tales cual yo soy"! Que todos seamos cristianos como Pablo. Pero muchas cosas lo impiden: sobre todo, el amor a cierto(s) pecado(s); el temor de ser avergonzados o criticados o perseguidos por los del mundo; las tentaciones del mundo; el poder político (como en el caso de Festo y Agripa) etc. Si nosotros dijéramos,"¡Quisiera Dios que todos fuesen como yo ... !" ¿qué añadiríamos? ¿excepto nuestro sufrimiento? ¿excepto las persecuciones contra nosotros? ¿Qué tanto nos cuesta ser cristianos?
Muy pocos hombres eminentes (como Festo y Agripa) se humillan delante del evangelio (1 Cor. 1:26). Después la iglesia llegó a ser popular con los tales, pero esto ocurrió cuando la iglesia había apostatado. Cuando llegó a ser mundana y corrupta, llegó a ser la religión oficial del imperio.
26:30 -- Cuando había dicho estas cosas, se levantó el rey. -- De esta manera el rey Agripa terminó la sesión. No tenía que escuchar más para saber que Pablo era inocente pero, aparte de eso, probablemente ya no quisiera oír más evangelio. De esta manera muchísimas personas "se levantan" para salir y no oír más. A veces "se levantan" para despedirse y a veces despiden al predicador, pero en ambos casos su alma todavía está perdida.
-- Y el gobernador, y Berenice, y los que se habían sentado con ellos. -- Cuando alguno se levanta para no oír más, a veces otros siguen su ejemplo. En esa ocasión Pablo no falló, sino que fue todo un éxito. El evangelio no falló (Isa. 55:10, 11). El trabajo de enseñar el evangelio puro nunca es en vano (1 Cor. 15:58).
26:31 -- y cuando se retiraron aparte, hablaban entre sí, -- pero no hablaban entre sí acerca del evangelio y de la necesidad de obedecerlo.
-- Diciendo: Ninguna cosa digna ni de muerte ni de prisión (cadenas, LBLA, margen) ha hecho este hombre. --
Desde el día en que Pablo fue prendido en Jerusalén (Hech. 21:33) después de concluir su tercer viaje, se ha escuchado el testimonio de Lisias (23:29), de Félix (24:1sig.), de Festo (25:26,27) y ahora del rey Agripa, confirmando la inocencia de Pablo. Los otros eran romanos pero ahora tenemos el testimonio de un judío eminente, conocedor del judaísmo.
26:32 -- Y Agripa dijo a Festo: Podía este hombre ser puesto en libertad, -- ¿Puesto en libertad? Si lo hubieran puesto en libertad, probablemente los judíos lo habrían asesinado. Sin embargo, el Señor tenía otros planes: le había dicho, "Ten ánimo, Pablo, como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques en Roma" (23:11). Pronto comenzarán el viaje (27:1) y, por fin, se cumplirá el propósito de Pablo de ir a Roma.
-- si no hubiera apelado a César. -- Pero ¿por qué había apelado a César? Porque no había justicia ni en Jerusalén ni en Cesarea. Los judíos eran injustos (aun criminales). En la corte de Festo no había justicia para Pablo (24:26, 27) y este gobernador romano estaba dispuesto a cooperar con los judíos para que Pablo volviera a Jerusalén, lo cual habría resultado en su muerte.
Es posible que la carta enviada por Festo al emperador haya recomendado buen tratamiento de Pablo, porque al llegar a Roma "el centurión entregó los presos al prefecto militar, pero a Pablo se le permitió vivir aparte, con un soldado que le custodiase ... Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento" (28:16, 30, 31).
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