La nieta del Señor Linh Capítulo 5

Capítulos cinco la canción alivia al anciano le hace olvidar el serio y también a la señora borda que ha vestido con la cabeza canina con parásitos corto como más deslizan no sé por la acera ya ha dado vuelta a la manzana y siente que el cansancio se apodere de el aire frío penal penetre en su garganta y le produce una especie de áspera pero se sorprende pensando que en el fondo no está desagradable por el contrario cuando inspira no percibe nada está claro que que el país no vuelve a nada a nada hasta miliar o agradable sin embargo el mar no está lejos el señor ni lo sabe todavía me parece estar viendo el barco en que llegó el inmenso puerto bordea de una bruja quien picotear en el profunda vientre de los cae géneros como si quisieran es vez carlos pero por más que inspiró cierre los ojos y vuelve a inspiran no consigue ver civil el olor del mar esa de la mezcla de mirar salitre y pescado hagan donado al sol el único color amar que conoce desde el día que tuvo que viajar hasta la costa a costa nada de marcha de la aldea para buscar una una vieja tía me y medio loca que a vía acabado vendiendo se enseña linchan ríe recordar a su día su boca de desde sentada y su pocos quemados por el sobre aquella mujer han margen de la vida que miraba a el mar y hablaba como si fuera un pariente con que aquí está en lo vez he acabado encontrando te lo había dicho ahora no te servirá de nada esconder la tía se haría machado del pueblo unas semanas atrás a día pasado varias varios días daban vagando por los arrozales como dormía tun tun bada en el suelo tenía el pelo y llena de barro seco las salsas de los caminos la bien de narrar desgarrando la ropa parecía lo que a mí lo cardiaca van siendo una vieja local y ex haus y altar que le hablaba al mar y hablar que tuvo aquí llevarse de allí a fuerza de tiranía durante todo el viaje de regreso no paro de murmurar maldición y con muros porque en cada compre con vecina que se cruzaba creía verá una ninfa y cada por creador encorvada bajo su vestida a un genio méxico en aquella época enseñó lin era fuerte llegó a su día a cuestas la mayor parte del trayecto de vuelta marcaban todos los músculos y tenía unos brazos tan desnudos quién podía parar un búfalo agarrando lo por los cuernos y las piernas yo mismo afirmando si