Al presentar su histórica conferencia de 1910 en la Casa del Pueblo de Barcelona, señalábamos cómo Pio Baroja, a pesar de su pasión por su patria chica, y su historia, sin caer en modo alguno en el fanatismo del nacionalismo euskaldun, fue arrestado en Navarra en el verano de 1936, pese a todo, por fuerzas carlistas (requetés) que se dirigían desde Pamplona a Guipúzcoa y que le retuvieron en el pueblo vecino de Santesteban; experiencia que le “asustó bastante”, se nos indica acreditadamente por la misma Wikipedia. Afortunadamente logró ser liberado de la cárcel municipal por mediación de Carlos Martínez de Campos y Serrano, duque de la Torre (quien fuera años más tarde preceptor del príncipe de España, don Juan Carlos). Y es que la guerra, en su totalidad, no hace distingos, y se lleva a todos por delante, de una manera o de otra.
El incidente se hace aún más interesante si atendemos al contenido de una sus obras más entretenidas y conocidas, “Zalacaín, el aventurero”, la cual se ambienta durante la III Guerra Carlista, obra que aquí se introduce brevemente, primero, con la invitación a su lectura desde RNE Radio 5, y luego en el audio de su adaptación al cine por el director Juan de Orduña en 1955, donde el propio Baroja aparece como una suerte de narrador al principio y en su fin. Les recomiendo, como siempre, ver la película, aunque sea difícil de conseguir (no tanto si se busca bien por la red).
Comentarios
Maravillosa escucha amigos, muchísimas gracias. Andrés.