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Comentarios
Decía Ortega y Gasset: "¿se toma la decisión de ocho individuos en contra de la de dos? grave error, entre ocho individuos caben verosímilmente más necios que entre dos"... Esto dicho así, de forma burda por Ortega, es lo ya hegemónico desde la ilustración: la interiorización del elitismo y el desprecio a las masas, la asunción de las jerarquías culturales, la autoridad de los que saben, los expertos, los que han estudiado... Es el modelo asumido como natural desde entonces por todo tipo de gobiernos, desde dictaduras a democracias representativas. Hegemonía que no se desvanece facilmente, pues prácticamente todos los intelectuales y referentes culturales (no hay mas que ver el desprecio de prácticamente todos ellos hacia el 15M) beben de éste modelo jerárquico, recordándonos al resto que la política se hace en las urnas y punto, y que “la gente” es inculta y egoísta, y que solo los líderes intelectuales, los tecnócratas y las clases medias pueden cambiar y mejorar las cosas. Y vaya si han logrado alimentar en nosotros esa desconfianza en nuestra capacidad para deliberar en común. Por eso nos hemos vuelto demasiado seguidores y delegadores, siempre en manos de lo que otros decidan lo nuestro... El sorteo, que para los griegos era el actuar democrático (los griegos no entenderían nuestras elecciones como ejercicios democráticos), para éstos liberales ilustrados sería la hecatombe si no lograran controlar de alguna forma las decisiones últimas que tomen los asamblearios analfabetos, porque nos llevarían a la ruina a todos...Y se las apañarían para hacerlo. De truños, disimulos, engaños y juegos malabares se las saben todas. Pero es que el problema no está en la necesidad de saberes técnicos o especializados, que es evidente, ni siquiera en cierta representación que tampoco es negativa per sé, sino en los intereses que cuentan en las decisiones que se toman... Decisiones que apelan a todos y que la ciencia no puede responder. Buen programa Nacher y compañía.