THOMAS LIGOTTI La Hacienda Espectral

Una casa encantada todo castillo tenebroso fortaleza infernal tiene una puerta secreta cuya llave son los sueños y su frontera tu imaginación y al otro lado oculta una mugrienta biblioteca llena de polvorientos volúmenes da cobijo a nuestra oscura colección hoy desenterramos el relato la hacienda espectral de thomas ligotti narrado por raúl maestro uno puede estar solo en la casa y sin embargo no estar solo hay tantas habitaciones tantas galerías y misterios tantos lugares donde un silencio peculiar resuena con secretos todos los objetos y superficies de la casa parecen oscuramente vibrantes un medio para acercar inquietudes distantes que se sienten pero no siempre se ven o se escuchan candelabros polvorientos levantan un remolino en el aire las paredes se ondulan formando relieves de filigrana su tíos retratos se estremecen dentro de sus marcos dorados y aun que la luz en la mayor parte de la casa se ha estancado y convertido en una neblina color sepia sigue siendo una neblina de fermentación una aura juguetona que envuelve este museo de trémulas santi uh edades así pues uno se puede sentir totalmente a solas en esta casa especialmente cuando se trata de un apartado edificio que cuelga en el mismo borde de la tierra y sobrevuela un océano lo frígido por una de las ventanas altas ayuda a vista de la costa desapareciendo en aguas grises y turbulentas las ventanas más bajas de la casa se abren a las susurrantes profundidades de un jardín desde hace tiempo descuidado y lleno de maleza que brota en prolíficas marañas un estrecho sendero atraviesa esta caótica es su verano cia y acaba al borde de un denso bosque avivado por un suave pero perpetuo viento océano jardín bosques los alrededores poseídos por una turbulencia visible que se hace eco de las invisibles turbulencias en el interior de la propia casa y cuando la noche máscara los movimientos de este paisaje son las estrellas las que se estremecen alrededor de la lívida y palpitan de luna sin embargo se puede no creer que haya un intercambio influencias entre la casa y el mundo a su alrededor pero sigue habiendo una presencia que invade cada instancia como si no existieran paredes que las dividiese en en el momento en el que se llega a semejante casa algo parece moverse al fondo de sus escenarios una compañía oculta de la que se desconoce su naturaleza ninguna pal puede instaurarse en estas habitaciones a pesar de permanecer solitarias en su propio vacío abandonadas en su sueño sin sueños durante las mañanas más inocentes y las tardes más