Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Pedazo capítulo. Conocí a este hombre cuando oí por la radio que lo habían matado. Me recuerda un poco al caso de Fernando Millán que, según los que lo vieron jugar, es el mejor jugador que ha habido en el Rayo Vallecano. Yo tuve la suerte de trabajar con él y digo la suerte porque fue un gran compañero. Se oían historias como que cuando él jugaba con la selección de Madrid, Alfonso Pérez se quedaba en el banquillo. Lo llamó el Barsa y por lo visto no fue porque se acababa de morir su padre y no quiso dejar sola a su madre. Debió jugar en la selección española con Guardiola de chaval. Como persona es un tío espectacular y trabaja de conductor de camión de recogida selectiva en Madrid por la noche. Todos los años juega con los compañeros un partido de fútbol sala y a pesar que está totalmente fuera de forma, la gente flipa de la calidad que tiene todavía.
Emocionante el relato. Te agradezco toda la información y el modo en que lo cuentas.
Programón. Me ha recordado mucho al que hiciste sobre Mágico, estaba pasando la mopa mientras lo escuchaba y en un determinado momento he tenido que parar y sentarme porque reconozco que estaba un poco emocionado. Me quedo especialmente con esa parte en la que con toda razón cuestionas quiénes somos ninguno de nosotros para juzgar la vida que llevó el Trinche. Es la segunda vez que planteas esta reflexión en tus programas y de nuevo me has hecho meditar largamente sobre ello. ¿Qué más da que el Trinche no llegara a Primera? ¿De verdad importa eso, cuando hizo feliz a tanta gente? Sigue haciendo estos programas por los que nació 'La locura de Bielsa'. Y todos los programas que quieras. Pero sobre todo estos. Un abrazo.
Gran programa sigues sorprendiendo, muchas gracias.
Gran programa! Recuerdo ver un reportaje de el en informe robinson. Te seguire escuchando!
Me ha encantado el relato. No conocía a Carlovich. Y me ha encantado descubrirlo.
muy bueno
Quien disfruta no ambiciona. Su motivación hacía el juego era puramente intrínseca, jugaba por lo que el propio juego le hacía ser y sentir. Por ello no jugó en lugares donde necesitaba entrenar para ganarse un puesto, ya que jugar para ganarse un puesto significaba dejar de jugar. Él era un ser muy sensible e inteligente, aunque ni él mismo supiera como explicar su comportamiento. Su pureza se rebelaba hacia aquello que le extrinsificaba la motivación: cualquier tipo de obligatoriedad. Así que se quedaba en su casa, porque en la vida como en el campo, era libre. ¿Cómo se sentiría cuando no se presentaba a jugar? Seguramente en un limbo absoluto. "Porque no hago lo que más amo?", se preguntaría. Él lo sufrió mucho, no tengo dudas. Sin embargo, por otra parte aquello lo haría sentir libre y rebelde. Él solo obedecía a su corazón y como ser intuitivo que era sospechaba que de alguna forma, en su radicalidad, estaba haciendo lo correcto. Y seguramente fue así, porque de otra modo no se hubiera convertido en el máximo exponente del romanticismo futbolístico que nadie como él representa. En definitiva, su amor por el juego era tan puro que no permitía que nadie lo pervirtiera con condiciones. Es como si tus padres te obligarán a casarte con la mujer que amas porque tiene mucho dinero. Y tú dices no, porque por dinero no te casas. El Trinche es el símbolo más grande del fútbol. Insuperable. Gracias por el podcast. Algunos lo estábamos esperando ;)
La locura de Bielsa y el Trinche, maravilloso programa, como no podía ser de otra manera. Símbolo y leyenda de un fútbol (y un estilo de vida) que ha desaparecido. Más programas así y muchas gracias. PD: recomiendo el reportaje sobre el Trinche de Informe Robinson, tremendo ese final con un Carlovich con lágrimas en los ojos recordando tiempos mejores.
Gran ejercicio de honestidad👏🏼👏🏼 Creo que el fútbol es pura pasión, y lo cierto es que a veces es muy difícil no dejarse llevar por historias increíbles (porque apetece muchísimo ser parte de ella, pero casi sin documentación...). Gran personaje el Trinche, reflejo de su sociedad. Gran trabajo.