Esta mañana hemos podido felicitar en directo a Txani Rodríguez, Premio Euskadi de Literatura 2021 por Los últimos románticos. Con este motivo, hemos aprovechado para ahondar en algunos de los temas que la autora aborda en la novela, tremendamente visibles especialmente tras la pandemia. Por ejemplo, la soledad de su protagonista es una de las claves de la historia. Es una Irune "tierna, muy sola, que a veces dan ganas de abrazarla y otras veces no sé si de darle un manotazo también" con la que se empatiza rápido.
Para el jurado del premio, la escritura de Txani Rodríguez es “incisiva, atenta al detalle y dotada de un ritmo narrativo excelente. Cuenta con una voz fresca, original y propia, que es el rasgo que más ha llamado la atención del tribunal”. La propia Txani reconoce que el personaje le ha permitido poder introducir una mirada con humor sobre una historia que en sí sería muy triste si no: "Tiene ocurrencias que ella eleva a categoría de grandes verdades".
Vigencia en un año marcado por la pandemia
Especialmente se hace reconocible esa soledad en este año marcado por el confinamiento impuesto por la crisis sanitaria, pero también en el sentido de la comunidad, que se ha revelado como el gran ausente de nuestra sociedad: "Se ha mirado pero no lo suficiente a los ancianos...", "en la pandemia nos hemos dado cuenta de quiénes eran nuestros vecinos, y eso es muy triste", cree Rodríguez.
Además, los conflictos laborales también sobrevuelan la historia. Se trata de una realidad, la de las huelgas y luchas laborales, que la autora de Llodio conoce bien a través del largo proceso de Tubacex. Para Txani, las relaciones entre los trabajadores, cada uno con sus circunstancias, capacidad de resistencia y aguante, son difíciles porque "hay diferencias entre cuándo parar o cuándo llegar a un acuerdo, si otros no quieren, por lo que surgen desavenencias entre los propios trabajadores".
Película a la vista
Por último, también hemos querido recordar que historia de "Los últimos románticos" no acaba aquí, ya que hace tiempo que sonaban rumores de una posible producción cinematográfica que llevara a las pantallas la historia de Irune. Una noticia que sigue adelante tal y como nos ha confirmado su autora. "Hace poco se ha sabido que la va a dirigir David Pérez Sañudo, director de Ane, y que el guión va a correr de la mano de Marina Pared", ganadora de un Goya precisamente también por la adaptación de Ane.
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