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Las tormentosas torturas inquisitoriales por parte de la Iglesia eran atroces, la herejía por simple acusación particular, vecinal o de alguien que conoce a un tercero y lo critica ante el poder eclesiástico, era suficiente motivo para que la Santa Inquisición dispusiese sus métodos de tortura más exactos y así, conseguir que el reo confiese, fuese o no culpable, la idea del reo era dejar de pasar tormento. José Manuel García Bautista narra como nadie - y muy light todo lo que expone en el escaparate de instrumentos que utilizaban, según José Manuel - la crudeza y violencia de unos enjuiciamientos inquisitoriales eclesiásticos, sin sentido común alguno, pero era lo que había entonces en esa época.
Esas Señales lumínicas que se hacen engrandecer, y se posan en forma de aura sobre el cuerpo de personas, de ciertas personas, o que hoy en día son santas por canonización de la Iglesia, y por el poder de una divinidad que elige a alguien, ya por un fin concreto y previsto. Personas mundanas, del mundo pecaminoso, y que esa Luz lo elije y cambia su conducta para con el Mundo. En las imágenes sagradas, estatuas sagradas de las iglesias y catedrales, etcétera, aparecen con un arito sobre sus cabezas.
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Como dijo El Maestro Jesus ; Por sus actos les conocereis, parece q a los cristianos se les han olvidado sus enseñanzas y mensajes.Millones de personas aun acudiendo a las iglesias, parece mentira con las atrocidades que han cometido toda su historia y las q aun cometen...