Zascandileando 026

SERIES
- Dominion: SyFy nos presenta un mundo postapocalíptico de humanos diezmados en guerra con los ángeles. Solo El Arcángel Miguel está de nuestro lado. La idea, sin ser original, no está mal, pero está ejecutada pobremente en casi todos los aspectos. Llena de clichés, sin una dirección clara y con una falta de humor alarmante.

- The Last Ship: Michael Bay nos propone su visión de la historia de supervivencia. Un virus hace polvo la humanidad y los únicos con posibilidad de arreglarlo son los tripulantes de un navío de guerra que sin saberlo hacían de escolta de una doctora que trabajaba en una vacuna. Topicazos a tutiplén, pero también mucho ritmo y mucho entretenimiento.

- The Leftovers: El 2% de la población mundial desaparece un día sin razón aparente. Años después la gente sigue tratando de darle sentido a sus vidas y en un pequeño pueblo son todo problemas: La familia del jefe de policía (a la que seguimos) es un pequeño desastre: La mujer pertenece a una extraña secta, el hijo trabaja para una especie de "salvador" iluminado en su rancho armado hasta los dientes y la
hija es una bala perdida. Todo muy misterioso, pero también con poco fuste. Además, no nos fiamos de Lindelof. Ni un pelo.

- Penny Dreadful: Magnífica serie con grandes intérpretes y el lado más terrorífico y fantástico del Londres victoriano. Nunca carga las tintas, nunca se desvía de lo que quiere contar y no le importa dar o quitar protagonismo a los personajes según la historia se beneficie de ello. Además Eva Green hace
toda una demostración de por qué es una de las grandes de su generación.

JUEGO DE TABLERO
- Eldritch Horror: Siguiendo la estela de Arkham Horror, se trata de un juego de mesa cooperativo que pierde parte del sabor porpiamente lovecraftiano para presentarse un poco más accesible, con menos mecánicas y subsistemas pero más depurado y con un mayor grado de intevención del jugador en cada turno. No es un juego corto (se tarda en torno a las dos horas largas en jugar una partida), pero no se hace pesado y se aprende a jugar muy fácil.